La gráfica del aprendizaje
El objetivo de este post no es mostrar el dinero que gano en Udemy (de hecho, no hay números en la captura de pantalla que he subido), sino compartir mi viaje como instructor, con la esperanza de inspirar a otros que tal vez estén empezando el suyo, o que se sientan frustrados porque las cosas no están saliendo como esperaban, y no pueden detectar qué es lo que está fallando.
He dividido mi viaje en 4 etapas. En todas ellas hay un único denominador común (un proceso de error/aprendizaje) y un único resultado al sumar todas las partes (crecimiento).
La etapa A representa lo que podríamos llamar "pensamiento mágico": Voy a publicar un curso y me voy a hacer rico enseguida. ¿Quién no ha caído en esa maravillosa fantasía? Yo sí. Y de la peor manera. Cuando eso no sucedió me frustré, culpé a Udemy, culpé a los estudiantes, culpé al sistema de revisión y culpé a mis competidores. Culpé a todo el mundo excepto a la única persona a la que debía culpar: a mí mismo.
El resultado obvio de esta mentalidad fue dejar de intentarlo. ¿Por qué iba a seguir? Había creado lo que veía como el curso más magnífico posible y ¡nadie era lo suficientemente inteligente como para darle el valor sagrado que tenía! Como resultado, perdí 2 valiosos años.
La etapa B comienza cuando me dije a mí mismo: "vamos a intentarlo una vez más, pero esta vez fijémonos en lo que hacen los ganadores y partamos de ahí". En esta etapa me dediqué a hacer dos cosas: inspirarme en las personas adecuadas (gracias Phil) y producir sin parar, sin centrarme en los números. Lo único que miraba era lo que podía hacer mejor en mi próximo curso.
Algo muy importante en esta etapa fue que entendí que nadie es experto en todo (especialmente yo), y por lo tanto necesitaba aprender mucho, y para eso tenía que asociarme con otros, intercambiar experiencias, vincularme con mis colegas.
Aproveché todas las oportunidades que me ofrecía Udemy para hacer networking. Estas acciones se reflejaron en mis gráficos y reforzaron esa convicción. El gran paso (fruto de esta mentalidad y que dio paso a la siguiente etapa), fue la decisión de participar en el evento global Udemy Live Berlín 2019. No fue fácil, vivo en Argentina, y mis ingresos aún no me permitían viajar tan cómodamente, pero sabía que era el paso correcto.
La etapa C (crecimiento inmediato y caída posterior) fue consecuencia directa de 2 aspectos: el encuentro de Berlín por un lado (que me dio contactos, asociaciones exitosas, grupos de apoyo, grandes amigos, y sobre todo mucho aprendizaje) y por otro lado la explosión de la pandemia de Covid en marzo de 2020.
Al principio mis ventas se dispararon, la calidad de mis productos mejoró, empecé a desarrollar un equipo (¿por qué me resistí tanto?) y todo parecía ir hacia arriba. Pero aún quedaban lecciones por aprender.
Las ventas cayeron bruscamente en los meses siguientes, y luego apenas si comenzaron a crecer ligeramente. Pero esta vez estaba dispuesto a culpar a la persona adecuada: a mí.
Era culpable de dar por sentado que el éxito estaba garantizado. Había sido secuestrado por la tonta idea de que a mis alumnos les encantará mi próximo curso, sólo porque les encantó el anterior. Al mismo tiempo, el mundo estaba cambiando y yo no podía ver hacia dónde iba, y estaba dejando que mis cursos fueran una reproducción constante de sí mismos. Estaba dando a mis alumnos más de lo mismo, en un paquete cada vez mejor. Algo tenía que cambiar, y rápido.
Así comenzó la etapa D, donde el gráfico muestra las mayores líneas de crecimiento que he tenido en toda mi carrera. ¿A qué se deben? A que reaccioné a lo aprendido durante la etapa C. Decidí dejar de pensar en hacer cursos que den dinero, y me centré en hacer cursos que mejoren la vida de mis alumnos. Cuando antes tardaba 1 mes en hacer un curso, ahora tardo 6 meses. Comencéa planificar mis próximos cursos como si fueran una serie de Netflix (no digo que lo vaya a conseguir, digo que uso ese concepto como objetivo).
Lo paradójico es que aprendí que cuando produces con total amor, el alumno se enamora de lo que haces, y logras de manera indirecta el objetivo que antes buscabas directamente.
Mi éxito en Udemy no significa que haya superado a nadie, sólo demuestra que me he superado a mí mismo. Que he aprendido de mis errores y que debo tener una actitud humilde si quiero seguir creciendo. Por eso he compartido este gráfico sin números, porque lo importante son esas líneas que suben y bajan, moviéndose al ritmo de mi propia inteligencia y de mi propia estupidez.
Si alguna vez te sientes atascado en tu carrera como creador de cursos, corre al espejo más cercano, allí encontrarás todas las respuestas.
Comentarios
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Muchas gracias por el post @FedeGaray
, siempre aportas valor en tus comentarios y eres una fuente de inspiración. Creo que tienes razón en lo que dices. Me gustó mucho cómo planteaste el curso de Python, se nota la evolución, está claro que detrás hay mucha planificación, trabajo y buen hacer.Yo también tardo muchísimo en hacer cursos, pero coincido contigo en que lo importante es la calidad y pensar siempre en el alumno. Si cumples eso (y alguna otras cosas, jeje), los resultados llegan.
Un abrazo.
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Excelente artículo @FedeGaray
muy claro y motivador. En mi caso la experiencia ha sido muy parecida y siento que actualmente estoy comenzando la etapa D. Gracias por compartir tu experiencia.Aprovecho para contarte que me encantó una entrevista que te realizo otro instructor en YouTube.
Saludos,
N.C. Kurt
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Muchas gracias por compartir @FedeGaray
, muy inspirador tu trayecto.2 -
Muchas gracias por el post amigo, realmente es algo muy alentador, he pasado por ese proceso y se lo duro y tormentoso que puede llegar a ser, de hecho recuerdo cuando después de un año solo vendí 3usd, pero todo es cuestión de paciencia, tener fe y ganas, pensar en que lo lograremos. Muchos éxitos y bendiciones para todos ustedes.
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